San Francisco Bojay, entre la decadencia de la presa

Por MARLENE GODÍNEZ PINEDA

*Hace muchos ayeres este pueblo fue dividido por la presa Endhó; hoy es una comunidad con muchas carencias y en medio de un foco de infección. Refieren vecinos que han muerto ya varias personas por enfermedades que atribuyen a la contaminación.

En San Francisco Bojay Pueblo, perteneciente al municipio de Tula, la mayor parte de los vecinos para las necesidades fisiológicas cuenta con letrinas o fosas sépticas, es decir no hay drenaje; la energía eléctrica es deficiente al igual que el servicio de agua potable.

Así es como viven los poco más de 200 habitantes de este lugar que antes formaba parte de un solo pueblo junto con San Francisco Bojay colonia, pero que fueron divididos cuando se construyó la presa Endhó. Ese cuerpo de agua que no les trajo más que perjuicios.

“Vivimos en un foco de contaminación, la presa Endhó es una de las decadencias que siempre hemos tenido; hoy no nos explicamos por qué se ha muerto mucha gente en San Francisco por enfermedades diversas; de diciembre a la fecha han sido cinco personas jóvenes”, expresó el ex delegado Juan Villegas Cruz.

Para el delegado municipal Víctor Villegas Luz las necesidades primordiales son la luz y el agua, amén de la plaza pública inconclusa con la que cuentan, misma que surgió de una gestión de hace años y apenas el año pasado se ejecutó. No saben para cuándo quedará lista porque llevan la primera etapa que ni siquiera está bien detallada.

Un cerro de adoquín se observa cerca de lo que pretende ser la plaza pública. Ese material es el retirado del centro de la ciudad de Tula, específicamente del jardín cuando se hizo el proyecto del andador turístico. No saben los vecinos para qué parte de su comunidad está destinado porque para la plaza pública no se contempla el adoquín porque aquí se proyectó el embanquetado.

Lo que sí saben es que es material de desecho que no tenía el gobierno municipal en donde tirarlo y se los fue a dejar en San Francisco Bojay, para abonarle al descuido en el que se encuentra el área del centro de la comunidad. Dado que ahí también se encuentra una construcción descuidada que en otro tiempo fue un preescolar.

También el dispensario, los lavaderos y baños con regaderas que hace casi 20 años les construyó Pemex, porque en las casas no contaban con agua en sus casas; ahora sí con la red pero no con un servicio frecuente. Ahora están abandonados, sin uso y sin mantenimiento, lo que le da al área céntrica, donde también se ubica la escuela primaria José María Morelos, un aspecto de abandono.

El delegado municipal Víctor Villegas Luz habla del bajo voltaje porque la red eléctrica no cubre a todas las viviendas. Por eso, dice, están presionando para que les mejoren el servicio y les concluyan la plaza pública, misma que se comenzó hace ya tres años.

Recientemente llegaron a la comunidad para realizar el levantamiento con miras a mejorar la electrificación, y que después llegarán topógrafos, por lo que el delegado tiene esperanzas de que así sea.

La comunidad cuenta con un pozo ya perforado con recursos del gobierno estatal, pero aún no opera a pesar de que lleva construido casi seis años. Ya está la bomba, pero hace falta entubar el agua para que llegue a las casas. En tanto San Francisco Bojay es surtida por otros pueblos, pero apenas dos horas uno o dos días a la semana.

Apenas en este año asumió el cargo de delegado el señor Víctor Villegas y sus prioridades son retomar el asunto del pozo, el de la luz y el de la obra de la plaza pública.

La comunidad cuenta con primaria y un jardín de niños; a la secundaria van a Xitejé de Zapata y otros niveles a lugares aledaños.*NI*

Deja un comentario